El gobierno español ha condecorado al ministro del interior de Marruecos Mohamed Hassad con la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil. Resulta tan llamativo que Madrid, y al contrario que otros países como Francia, se limita a condecorar a responsables de la seguridad dando la impresión de que Marruecos es su “Gendarme del Sur”.
La condecoración fue concedida el viernes 4 de septiembre a propuesta del ministro de exteriores Manuel García Margallo y no del interior. La noticia fue publicada en el boletín oficial el 5 de septiembre. Sin embargo, en Marruecos los medios de comunicación oficiales evitaron hablar de esta condecoración.
La prensa independiente en Marruecos se refirió al tema a raíz del artículo publicado hace pocos días por el periódico digital: www.eldiario.es. Señala también que esta condecoración podría causar protestas en España debido a la supuesta implicación de los cuerpos de seguridad que dependen del ministerio del interior en la vulneración de los derechos humanos.
El gobierno español otorga la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil a extranjeros que han servido los intereses de España, por lo tanto no estamos ante un servicio a las relaciones bilaterales. Quizás esta justificación llevó a la prensa oficial a no hablar de la condecoración.
Es la primera vez que el ministerio de exteriores de España propone a un ministro del interior a esta condecoración. De costumbre, suele proponer a diplomáticos extranjeros. La visión de Margallo a Ceuta y Melilla es clave para entender el motivo que le llevó a proponer a Hassad.
Margallo es el ministro más intolerable con Marruecos en la cuestión de Ceuta y Melilla. Incluso llegó a advertir a Marruecos en el 2013 de que si Rabat plantee este tema pues sería el fin de las buenas relaciones. El ministro del interior de Marruecos construyó una tercera valla para proteger a Melilla de los inmigrantes y aplicó el convenio de inmigración firmado en 1992, los anteriores ministros del interior en Marruecos se negaban a aplicar dicho convenio. Todo esto ha sido muy bien apreciado por Margallo, y por lo tanto propuso al ministro a la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil.
Por otra parte, resulta muy llamativo que el gobierno de España, que sea del PP o del PSOE, se limita a condecorar solamente a los responsables de la seguridad en Marruecos sin extenderse a los políticos y los intelectuales por no hablar de los militantes de derechos humanos.
Ocurre lo contrario en el caso de otros países como Francia. El gobierno galo se destaca por otorgar condecoraciones a intelectuales y miembros de las ONGs mucho más que a los políticos y rara vez a los responsables de la seguridad.
Con su comportamiento, España está dando la impresión que ve en Marruecos su “Gendarme del Sur” y tampoco está a la altura de los países democráticos que prefieren condecorar a los intelectuales y los defensores de las libertades.
https://www.boe.es/boe/dias/2015/09/05/pdfs/BOE-A-2015-9631.pdf
